por Sayyed Hassan Nasralá, Secretario General de Hezbolá. Edición del Equipo del Sitio Web de Al Manar, en Al Manar
El secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá, ha aconsejado a Arabia Saudí no dejarse cegar por el odio y la arrogancia y tratar los temas de la región por medio de negociaciones, advirtiendo que sus planes fracasarán de una forma deshonrosa si continúa insistiendo en promover conflictos.
“Arabia Saudí y sus gobernantes tienen una posibilidad de contener la situación. Los yemeníes, los bahreiníes, los sirios, los iraníes y los iraquíes están preparados para las negociaciones. No seáis arrogantes ni os dejéis cegar por el odio. Más bien, deberíais ser parte de la solución de las crisis regionales”, dijo Sayyed Nasralá en un discurso televisivo el viernes por la tarde durante una ceremonia en homenaje del comandante de Hezbolá Ismail Zahri, que murió la pasada semana debido a una larga enfermedad.
Sayyed Nasralá advirtió a los saudíes que si insisten en la persistencia de conflictos, ellos serán los derrotados y “el plan de los Al Saúd fracasará de una forma deshonrosa. Todos los datos sobre el terreno apuntan a tal resultado”.
Sayyed Nasralá se refirió a las recientes visitas de un general y otras figuras saudíes a la entidad sionista, señalando ellas forman parte de un reconocimiento oficial de Israel. “El mundo árabe está en las peores condiciones de su historia. El peor desarrollo de las últimas semanas son los contactos saudíes con los israelíes, que se han hecho públicos”.
“Cuando el general y las otras figuras saudíes, por supuesto con el consentimiento del régimen saudí, que controla todo lo que hacen sus ciudadanos, visitaron Israel, ellos allanaron el terreno para una relación abierta con el enemigo sionista. Cuando Arabia Saudí, que intenta presentarse como el “estado del Islam, el Corán y la tierra de la profecía”, reconoce Israel entonces estamos ante una catástrofe religiosa y cultural. Eventualmente, esto será un pretexto para que otros países árabes sigan el camino de Arabia Saudí”, dijo el secretario general de Hezbolá.
El general saudí retirado Anwar Ashki encabezó una delegación de académicos y empresarios durante una visita a la entidad sionista la pasada semana, cuando él se reunió con responsables israelíes, entre los que estaba el director general del Ministerio de Exteriores, Dore Gold, y el coordinador de las actividades del gobierno en los Territorios Ocupados, mayor general Yoav Mordechai, así como varios miembros de la Knesset, señaló el diario Haaretz.
En los últimos años, el príncipe saudí Turki bin Faisal al Saúd se reunió abiertamente con dos altos oficiales de las fuerzas de ocupación israelíes, Yaakov Amidror y Amos Yadlin. El general y el príncipe saudí fueron entrevistados profusamente por los medios israelíes, establecieron vínculos con “organizaciones pacifistas” israelíes y se sentaron junto con delegados israelíes en conferencias internacionales en todo el mundo.
“Cuando un conocido príncipe se reúne con responsables israelíes y un general visita los territorios ocupados, esto no puede ocurrir sin la aprobación del régimen saudí”, dijo Sayyed Nasralá, que añadió que, después de que tales contactos fueran realizados en secreto, ahora ellos tienen lugar de forma abierta y pública.
“Si cualquier figura árabe, ya fuera jordana, egipcia, siria etc, llevara a cabo tales acciones sería condenada y denunciada por los árabes”, señaló Sayyed Nasralá, que hizo un llamamiento a la población árabe para que rechace tales actos, que sólo sirven a los enemigos y amenazan la región.
Sayyed Nasralá dijo que la apertura de relaciones entre Arabia Saudí e Israel no ha estado sujeta a ninguna precondición por parte de Arabia Saudí, que si impone sí condiciones de rendición a los yemeníes, bahreiníes, iraníes etc, cuando éstos presentan propuestas para dialogar.
Sayyed Nasralá ridiculizó la postura del ministro de Exteriores saudí hace unos día cuando “él se nombró a sí mismo custodio y gobernador del pueblo sirio y realizó una propuesta a Rusia ofreciéndole una cuota de poder en la región. Esto es gracioso y una pura farsa”.
“Nosotros decimos a los saudíes: No podéis ganar esta guerra ni imponer vuestras condiciones. No estáis en posición de dividir la región en cuotas ni fijar condiciones ni tampoco sois los reyes gobernantes de la misma”. “Lo que ha ocurrido en Alepo es muy importante y ha afectado a las ecuaciones regionales. Los sueños imperiales han caído en Alepo ante la firmeza de la Resistencia y el pueblo. ¿Piensa Abel al Yubeir que él puede engañar al mundo en un momento en el que los takfiris que siguen vuestra ideología están asesinando a un sacerdote en una iglesia (de Normandía), atacando Niza, matando inocentes en Karradah (Bagdad) y asesinando a un niño palestino en Siria? Ésta es la ideología wahabí takfiri. Vuestros planes y ambiciones no tienen ningún futuro”.
Su Eminencia lamentó que la causa palestina haya sido olvidada y socavada por algunos regímenes árabes. Sin embargo, él alabó al mártir palestino, Mohammad al Fakih, del pueblo de Surir, al noroeste de Al Jalil (Hebrón), como el “lado brillante” del mundo árabe y “un icono de la resistencia y del rechazo a la ocupación y la hegemonía israelíes”.
Hace varios días, dijo Sayyed Nasralá, los bahreiníes celebraron grandes sentadas y protestas contra el juicio de Sheij Issa al Qassim “a pesar de las duras condiciones meteorológicas, impidiendo al régimen cometer un grave error contra la figura religiosa bahreiní”. Él dijo que el régimen de Bahrein “acusa ahora falsamente al Sheij Qassem, que es bien conocido por su integridad, de lavado de dinero”, una acusación que refleja el hundimiento de la política de los dirigentes de ese país.
“Su imagen es más limpia y más clara que la de aquellos con los rostros sucios y mentes injustas que están buscando oprimirle”, añadió.
En lo que se refiere al Líbano, Sayyed Nasralá pidió al gobierno libanés que asuma su responsabilidad y preserve la soberanía sobre su territorio y en especial en Gayar, un pueblo que la entidad sionista busca anexionar.
Sayyed Nasralá también consideró al gobierno responsable de los problemas que azotan al país (agua, electricidad, corrupción etc) y advirtió que no se debe culpar de los mismos al vacío presidencial.
Su Eminencia agradeció al comandante Ismail Zahri por su larga lucha y sus sacrificios en las filas de la resistencia y enumeró sus sacrificios y sus atributos. “Zahri se unió a las filas de la Resistencia desde el principio y fue el primero en especializarse en la tecnología de la artillería. Él poseía un profundo amor por el conocimiento y la ciencia. Era muy apasionado, honesto y leal. Y con tales líderes, sin duda, triunfaremos”.
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