El fin del arte francés: “el capitalismo laboral” llega a Francia en 2018

por Ramin Mazaheri

Los franceses no quieren verse a sí mismos como capitalistas en miniatura: quieren verse a sí mismos como artistas.

O al menos artesanos. Y muchos de ellos lo son, pero la mentalidad tecnócrata calculadora ni siquiera puede concebir lo que significa ser un “artesano”, en nada.

La mentalidad capitalista calculadora podría ser capaz de pensar en qué arte él o ella podría crear … lo que podría convertirlos en dinero.

Pero el presidente francés Emmanuel Macron no es un artista porque su dominio es la política, y la política está demasiado imbuida de la preservación de los valores sagrados y los valores de la sociedad como para estar sujeta al juguete de un sabio. Macron ahora es un carcamal político, después de cumplir recientemente 40 años, pero al menos en su vejez es un rey. O más bien, una reina: del amo imperial de la UE, Alemania.

Tal vez porque Macron renunció a sus objetivos artísticos serios a una edad temprana – con una representación obscena y juvenil de la historia de su violación legal por parte de su ex maestra de escuela secundaria / esposa actual – inexorablemente está recorriendo con una aplanadora el camino para convertir a Francia en una nación de capitalistas en miniatura.

Esto significa que Francia está siguiendo el camino  del “capitalismo laboral”: el modelo de los EE. UU., El Reino Unido y Alemania, o el “mundo anglosajón” (para usar una frase francesa detestada por los anglosajones).

El objetivo del capitalismo laboral – popularizado por Margaret Thatcher (que lo llamó “capitalismo popular”) y tipificado por el “capitalismo de fondos de pensiones”-401k (enlace agregado por el editor) que George W. Bush no pudo implementar plenamente (de la misma forma que “las armas no se implementaron completamente” en una guerra que no cuentó con una detonación nuclear) – es hacer que los trabajadores elijan políticas que prioricen sus resultados personales, en lugar de la sociedad en general o sus compañeros de clase.

Por lo tanto, en lo que se refiere a las cuestiones de gestión económica: ya no se trata de política, sino de negocios, estúpido.

Pero el artesano francés promedio – el maestro de escuela que puede hacer aprender al adolescente más reacio, el trabajador del gobierno que conoce las reglas tan bien que en realidad puede ayudar a que tu abuelo consiga que le paguen los costos de atención médica – está haciendo su trabajo diario motivado por valores que son totalmente insignificantes en el capitalismo, es decir, obtener ganancias, algo dificil de creer para muchos, ya lo sé.

La sociedad francesa nunca fue diseñada para producir “capitalistas en miniatura”: la sociedad francesa fue diseñada para producir “franceses en miniatura”, ya sea en Francia, Líbano, Argelia, Indochina, Polinesia, Madagascar, etc. Sí, estos franceses también son claramente imperialistas-capitalistas, pero en primer lugar son “franceses”, y eso es un diferencia genuina con el modelo anglosajón. (Muchos en los países antes mencionados pueden preguntarse con razón por qué aparentemente estoy diciendo que el modelo francés es superior …)

El “capitalismo laboral” es una contradicción porque la mentalidad y los valores de aquellos clasificados como “labor” son opuestos a los de los capitalistas. El primero está haciendo un trabajo honesto: estos últimos (en su mayoría) están sacando provecho de su sudor , tanto como los ricos heredados e insuficientemente cargados de impuestos.

Pero el objetivo del “neoliberalismo universal” – que, durante la evolución de tres siglos del capitalismo moderno ha demostrado ser la forma dominante desde hace casi 40 años – es exportar la mentalidad capitalista al 99%.

Una estratagema cultural clave para lograr esto es en realidad promovida por la minoría más brutalizada, segregada y dominada por la fuerza en el mundo – los Negros en Estados Unidos: sus canciones de rap son los mejores himnos al capitalismo laboral, promoviendo a los jóvenes del mundo la idea de la vida se trata de apresurarnos, que la vida es una jungla, que el dinero, el poder, el sexismo y la agresividad desenfrenada son objetivos social que valen la pena. Esta falla no es de los Negros: no se les permite la oportunidad de permitir que florezca ninguna otra ideología. Diablos, ¡ni siquiera se les permitió poseer tambores durante siglos: por eso dudo que se les permitan ideologías“subversivas” y anti-capitalistas!

Francia tiene rap (¡horror, horror!), Pero aún no están preparados para el capitalismo de fondos de pensiones 401k. Sin embargo, 2018 comienza con los elogios de la BBC, The Economist y muchos otros imperialistas-capitalistas por la ruta decidida que Macron ha tomado y tomará.

Resumiré rápidamente su plan ingenioso y evidentemente cobarde: destripar el código laboral, convirtiendo al trabajo en más riesgoso e indeseable, y luego destripar el sistema de desempleo, para terminar con el incentivo para abandonar un trabajo pésimo.

Cree siervos sin sentido, aislados, miniatura capitalistas,  amarrados a su máquinas … verá aumentar las ganancias. Esto es lo mismo que en las fábricas de seda francesas del siglo XIX, ¿no?

Si crees que estoy exagerando: la primera parte del plan ya se implementó. Fue implementado de una manera decididamente antidemocrática que le permitió a Macron entrar en la nueva raza occidental de “hombre fuerte liberal”; el plan de Macron, igualmente despreciable, de reformar el sistema de desempleo será el punto focal de la nación en las próximas semanas.

Entonces, ya casi llegamos. Cuando lleguemos completamente, puedes apostar a que Macron recibirá aún más aplausos anglosajones. Diablos, incluso recibirá aplausos chinos por dar la bienvenida a sus productos de aun más bajo costo. Pero dados los ciertos resultados a largo plazo generados por 40 años de neoliberalismo, no recibirá aplausos de los franceses cuando llegue la reelección en 2022. Macron se unirá al club de “uno-y-listo” con Sarkozy y Hollande, y los tres serán recordados como herramientas del neo-imperialismo caníbal de la UE en “historias populares”, y como valientes reformistas en “historias principales (promotionadas por el 1%)”.

¡Pero espera – hay mas! El “capitalismo laboral” es más que una mentalidad, después de todo …

Promover la deuda es la manera práctica en que los capitalistas en miniatura pueden demostrar lo cachondos que son: es por eso que el “capitalismo laboral” alienta a los trabajadores a asumir la mayor deuda posible comprando viviendas, automóviles, títulos universitarios, televisores de pantalla grande en cada habitación, rescates del FMI, etc. En el capitalismo uno gana acceso a la clase media a través del privilegio de asumir una deuda (interés compuesto), por supuesto.

El ápice de este estilo de vida es invertir en el mercado de valores. ¡Entonces un “trabajador” realmente se convierte en capitalista! Por supuesto … su nivel de propiedad de acciones es tan mínimo que no tienen absolutamente ninguna voz sobre cómo se ejecuta la empresa / país. Sin embargo, la propiedad de acciones significa que los capitalistas en miniatura ahora realmente se preocupan más por las ganancias – después de todo, han atado su futuro a la salud del mercado de valores.

Sorprendentemente, casi la mitad de la población de los Estados Unidos posee acciones. O, como se informa a la inversa y lamentablemente en sus medios capitalistas: “Casi la mitad del país tiene $0 invertidos en el mercado …”.

En Francia, ese número es solo del 7% … pero Macron les enseñará.

Pero Roma no se construyó en un día, y no comenzaron en la parte superior, por lo que será necesario tomar otros pasos primero:

Después de que el sistema de desempleo se desvanezca, vendrá la ola de privatizaciones de activos estatales. Luego serán “vendidos” al consumidor / ciudadano / trabajador en forma de capitalismo irresponsable estilo Thatcherite. Finalmente, se convertirán en “los amos de sus futuros” con un capitalismo de fondos de pensiones 401k. ¿Macron logrará llegar tan lejos? El tiempo lo dirá….

Los próximos meses en Francia se centrarán en los cambios al sistema de desempleo, y un largo invierno podría significar pocos con fuego en la barriga para protestar … no es que a los hombres fuertes liberales les importe un ápice la opinión pública, por supuesto, eso ha sido probado repetidamente por Hollande y Macron. La “deformidad” de desempleo más controvertida es: rechazar dos ofertas de trabajo del centro de trabajo del gobierno … y perder sus “beneficios” (es decir, lo que ya ha pagado en el sistema a través de sus impuestos).

Siervos encadenados a la tierra / máquina … ¡ah, el modelo occidental de “valores universales”!

Si los franceses no se consideran artistas, ciertamente se consideran pensadores.

Pero para la mentalidad capitalista / neoliberal / imperial / estadounidense – han estado pensando en cosas equivocadas, y por lo tanto la  ‘talentosa décima aristocracia” ha promovido a Macron y la política de identidad, que es lo opuesto a la solidaridad socialista.

“Capitalismo laboral” … bueno, al menos todos estamos “solos juntos”.

El modelo francés pronto se encontrará “perdido”, pero eso sería “seriamente cómico” para los anglosajones. Los trabajadores no calificados pronto serán los “muertos vivientes”, tomando “vacaciones de trabajo” para que el 1% pueda tomar la “mitad más grande” de las ganancias. Por supuesto, esto es solo una “opinión imparcial” de alguien que está “claramente confundido”. ¡Esta columna no era ni siquiera una “copia original” sino una “estimación exacta” e “imitación genuina” de pensadores económicos más inteligentes! Meh … “la misma diferencia” … y perdón por parlotear a aquellos paraa los que todo esto son “noticias viejas”.

Ramin Mazaheri es el principal corresponsal en París para PressTV y vive en Francia desde 2009. Ha sido reportero diario en los Estados Unidos y ha informado desde Irán, Cuba, Egipto, Túnez, Corea del Sur y otros lugares. Su trabajo ha aparecido en varias periódicos, revistas, y sitios web, así como en la radio y la televisión. Él puede ser contactado en Facebook.