Por Peter Koenig and Press TV , Global Research, Marzo 16, 2022
Introducción
Las sanciones a Rusia, incluida la prohibición de invertir en el sector energético ruso, están perjudicando a la economía de la UE.
Los ministros de Economía de la UE advierten que las sanciones impuestas a Rusia por el conflicto de Ucrania perjudicarán gravemente a la economía de la UE durante un periodo de tiempo desconocido.
Los precios de los carburantes y los alimentos van a subir aún más de lo que ya lo han hecho.
Mientras el coste de la vida en la UE se dispara, los miembros del sindicato se manifestaron el martes ante una reunión de los ministros de Economía de la UE en Bruselas. Quieren que los líderes del bloque proporcionen más apoyo a los ciudadanos de la UE que se están viendo afectados por las ramificaciones financieras derivadas del conflicto en Ucrania.
Los ministros de Economía han aprobado el cuarto paquete de sanciones contra Rusia. Se han impuesto a 600 personas y también a las exportaciones rusas. Sin embargo, hay un efecto boomerang muy negativo para la propia UE.
Rusia, que es ahora el país más sancionado del mundo, ha sido eliminada de la llamada cláusula de nación más favorecida de la Organización Mundial del Comercio.
Los ministros de Economía afirman que los países de la UE más afectados por la crisis de los refugiados ucranianos disponen de préstamos por valor de 200.000 millones de euros.
Los críticos afirman que si los líderes occidentales hubieran mostrado más habilidad y compromiso al escuchar las preocupaciones de Rusia en materia de seguridad, podría haberse evitado la miseria que ahora padecen los ciudadanos ucranianos y las dificultades financieras que sufren los ciudadanos de la UE.
PressTV: ¿Cuáles son los efectos de las sanciones a las industrias petroleras rusas sobre la tasa de inflación y el precio de la energía en la UE?
Peter Koenig: ¡Horroroso! Alemania depende en un 50% de la energía de hidrocarburos de Rusia. Tienen que encontrar otras fuentes, y eso no será inmediato.
En primer lugar, Estados Unidos querrá vender su gas fraccionado a Alemania a precios aproximadamente un 50% más altos que los que actualmente vende Rusia.
Luego, tendrán que buscar otras fuentes, probablemente en Oriente Medio.
Por cierto, Arabia Saudí ya ha declarado que prefiere vender su petróleo y su gas a China en yuanes, que a Estados Unidos y a Occidente: se sienten más seguros con la moneda china que con un dólar y un euro que se tambalean y que posiblemente se hundan pronto.
¿Cuál será la inflación? Es difícil de predecir: podría ser de entre el 30% y el 50%, ya que la energía lo afecta todo, el ciclo completo de producción de alimentos, la industria, el transporte, la calefacción y mucho más. La grave escasez de energía también llevará a las pequeñas y medianas empresas a la quiebra, creará desempleo, miseria social y hambruna.
Esto puede ser, como mínimo, un fenómeno de extrema dificultad hasta que se encuentren nuevas fuentes de energía.
PressTV: ¿Por qué Alemania acepta estas sanciones impuestas por la UE -en realidad, por Estados Unidos-?
Alemania está totalmente en manos y bajo el control de Washington -lo ha estado desde el final de la Segunda Guerra Mundial- como ha demostrado claramente la señora Merkel, durante los últimos 16 años. Y lo mismo hicieron sus predecesores.
Una de las razones podría ser que Alemania todavía no tiene un Acuerdo de Paz – sí, no lo tienen. Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, la “Paz” alemana se administra a través de un acuerdo de armisticio que es controlado y enmarcado por las llamadas Fuerzas Aliadas, es decir, Estados Unidos, que actúa como el imperio en nombre de los otros aliados.
Varios cancilleres anteriores a Merkel han tratado de eludir las estrictas condiciones de obediencia a los amos de Washington. Se les dijo inequívocamente “NO” bajo ninguna circunstancia… o de lo contrario.
Esto explica también la base más importante de la OTAN en Ramstein, en el suroeste de Alemania, con incontables cabezas nucleares, a pesar de que Alemania forma parte del tratado no nuclear.
PressTV: ¿Cuáles son las perspectivas para el futuro de las negociaciones entre Rusia y Ucrania?
PK: Esa es una buena pregunta.
Recientemente ha habido indicios de que el presidente ucraniano Zelenskyy y Vladimir Putin podrían reunirse en Jerusalén, en una cumbre con la mediación del primer ministro israelí Naftali Bennett.
Pero ninguna de las partes lo ha confirmado, y no se han fijado fechas.
Anteriormente, Zelenskyy indicó que podría estar dispuesto a hacer ciertas “concesiones”.
Hoy, 15 de marzo, RT cita a Zelenskyy diciendo que “los aliados de la OTAN no quieren ver a Ucrania entre sus filas y Kiev se da cuenta de ello. Ahora Kiev busca la protección de los Estados miembros individuales”.
Sin embargo, no nos engañemos, Zelenskyy es un peón de Estados Unidos totalmente controlado por Washington. No puede tomar decisiones soberanas, sobre todo en lo que respecta a los intereses estadounidenses.
Ucrania no está en guerra, es Estados Unidos quien está llevando a cabo una guerra por delegación contra Rusia en el territorio de Ucrania.
El motivo de EE.UU. es el mismo que ya tenía durante la Segunda Guerra Mundial -si no mucho antes- y luego durante la Guerra Fría, controlar el enorme territorio de la Rusia rica en recursos.
Y como línea de derivación, por así decirlo, acercarse a las fronteras de China -que en el lado del Pacífico Oriental ya está rodeada por muchas bases militares estadounidenses o que albergan armamento y personal de Estados Unidos.
Además de todos los recursos naturales -en el territorio de Rusia y bajo él-, Rusia y Ucrania son también el granero de Europa. Una guerra, iniciada y alimentada por Occidente, cerrará con toda seguridad esa línea de suministro de alimentos a Europa. Puede traer escasez y hambruna a Europa y más allá.
El imperio se está derrumbando cada vez más rápido, y el dólar y su hermana pequeña, el euro, también se tambalean a una velocidad acelerada.
Eso sí, todos los líderes occidentales, incluidos los de Australia y Nueva Zelanda, fueron elegidos no por el pueblo, sino por esas élites y corporaciones financieras que manipulan el actual ascenso de una tiranía invisible en la historia tal y como la conocemos.
Lo que se está gestando es una tiranía de la salud: la OMS está adquiriendo el control total de todos los sistemas de salud de sus 194 países miembros, anulando de hecho las constituciones nacionales.
Si el plan se mantiene, debería ser legal en 2024. La mayoría de la gente de todo el mundo no lo sabe, ya que se paga a los medios de comunicación para que guarden silencio al respecto. Todo esto sucede en las sombras de la guerra en Ucrania.
Sólo podemos esperar que haya un despertar general y que el plan fracase.
Muchos de estos supuestos líderes occidentales fueron a la “academia” de Klaus Schwab (CEO y fundador del WEF) para Jóvenes Líderes Globales”, donde aprendieron las tácticas de la dictadura, que conducen a la tiranía, si encuentran la rebelión de los ciudadanos.
Un ejemplo de ello puede ser Canadá. Estos “líderes” (sic) están comprados por el FEM y los manipuladores del FEM, y no tienen ningún interés en la gente de sus países. No les importa si los ciudadanos de sus naciones viven o mueren.
Esta es una larga respuesta a una breve pregunta sobre las perspectivas de futuro de las negociaciones entre Rusia y Ucrania.
Personalmente, no creo que haya una guerra nuclear. Hay demasiado en juego para la élite. La OTAN y todos sus miembros conocen la capacidad militar y nuclear de Rusia. Por lo tanto, es posible que se abstengan de una guerra total, y en su lugar hagan creer que Rusia se derrumba bajo el castigo de las sanciones.
Biden acaba de anunciar que su administración destinará mil millones de dólares a “apoyar” a los medios de comunicación, es decir, a corromperlos para que sigan mintiendo y propagando la falsa narrativa gubernamental.
Rusia se verá cada día menos afectada por las calumnias y sanciones occidentales, ya que la alianza Rusia-China-SCO (Organización de Cooperación de Shanghai) es autosuficiente en todos los bienes y servicios vitales.
La tendencia es hacia un mundo multipolar. Es muy posible que la conclusión de la guerra de Ucrania conduzca en esta dirección, ojalá un nuevo paradigma mundial pacífico.
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