[Esta columna fue escrita para la Revista Unz]
Francamente, nunca he considerado a los grupos de ataque de los portaaviones de la USN como un elemento de la Marina de los EE. UU. Sí, en teoría, existía la idea de desplegar en avanzada estos transportistas para “llevarles la guerra a los soviéticos” (en la península de Kola) antes de que pudieran lanzar sus submarinos y aviones a través del estrecho GUIK al Atlántico. En teoría, también debería haber sido una armada de 600 barcos, pero eso nunca sucedió. En realidad, por supuesto, los grupos de choque estadounidenses eran el último instrumento para “disciplinar a las colonias” que el tío Shmuel estacionaría frente a la costa de un país desobediente a las demandas y al saqueo sistemático de los Estados Unidos. Dado que la mayoría de los países, en el siglo XX, no eran capaces de hundir un portaaviones de los EE. UU. ni prevalecer sobre los aviones comparativamente avanzados desplegados en ellos, este era, en general, un juego muy seguro para los EE. UU.
En cuanto a “llevarles la guerra a los soviéticos”, la verdad es que si hubiera llegado a una guerra real, los portaaviones estadounidenses se habrían mantenido lejos de la formidable capacidad de los misiles de crucero soviéticos (lanzados simultáneamente por aviones, barcos de superficie y submarinos) ) por una razón muy simple: cada vez que se modela un ataque de este tipo, un número suficiente de misiles soviéticos atraviesan con éxito el cordón protector alrededor del portaaviones y lo golpean con éxito con resultados devastadores (mientras hundir un portaaviones no es tan fácil, dañarlo y hacelo inoperable no necesita tantas descargas de misil).
¡Y eso fue mucho antes de los misiles hipersónicos como el Kinzhal o el Zircon!
Verdaderamente, como un instrumento para disuadir o derrotar a los soviéticos, los grupos de ataque de la USN ya eran obsoletos en la década de 1980, mucho antes de que los rusos desplegaran sus misiles hipersónicos que, como explicó mi amigo Andrey Martyanov en sus libros (ver aquí y aquí ) y en su blog (ver aquí), básicamente hicieron que toda la flota de superficie de los EE. UU. se volviera obsoleta no solo para luchar contra Rusia, sino contra cualquier país que posea tales misiles. Dichos países ya incluyen a India y China, pero pronto habrá muchos más, ¡probablemente Irán!
Hoy, sin embargo, no discutiré el tema de los misiles, sino lo que sucedió recientemente en el USS Theodore Roosevelt, lo que probablemente ya sepas: el capitán fue despedido por escribir una carta (según se le acusa, sin pasar por la cadena de mando) para solicitar ayuda, ya que su tripulación se infectó con el virus. Su carta fue publicada por el San Francisco Chronicle y puede leerla aquí.
Curiosamente, cuando el capitán de la Armada Brett Crozier, abandonó el barco, sus marineros le dieron una gran ovación:
Luego, el secretario interino de la Armada, Thomas Modly, llamó al Capitán Crozier “estúpido”. Eso también se hizo público, y tuvo que disculparse y renunciar ( ¡Modly oviamente no es ningún genio! ). Luego, incluso más gente de la tripulación del buque también enfermó, ¡incluido el propio Crozier!
A ésto se conoce en la jerga militar de los EE. UU. como “clusterbleep” …
Sin embargo, también hay muchas otras cosas interesantes que salen de esta historia.
Primero, lo obvio: los portaaviones de la USN no pueden operar efectivamente bajo un ataque biológico (un virus verdaderamente diseñado como arma letal podría ser mucho más transmisible que el SARS-COV-2 y por eso aún mucho más mortal). Esto también indica que probablemente tampoco les hubiera ido mejor bajo un verdadero ataque de guerra química.
Teniendo en cuenta que, en realidad, los portaaviones de la USN son un instrumento colonial de represión y no son buques adecuados para enfrentarse a la URSS (que tenía capacidades reales para la guerra biológica), lo cual tiene sentido ( dado que la mayoría de los laboratorios universitarios y similares están en capacidad de producir algún tipo de virus y usarlo como arma, de hecho los virus diseñados como armas como del tipo efectivamente utilizados en sistemas de entrega especiales, sólo pueden ser producidos por una lista limitada de países). Sin embargo, en teoría, todas las formaciones / unidades / subunidades / barcos / aeronaves / armaduras / etc. de una superpotencia militar deben estar capacitadas para operar en caso de un ataque nuclear, químico y biológico. Claramente, este no es el caso con los portaaviones estadounidenses, muy probablemente porque nadie en los Estados Unidos realmente esperaba tal ataque, al menos no durante la Guerra Fría.
Sin embargo, para la situación actual, creo que la lección es clara: la USN simplemente no tiene una capacidad efectiva para operar en condiciones de ataque NBC.
Por cierto, esto también parece ser cierto para los franceses, ¡cuyo único portaaviones tiene un 30% de marineros infectados!
En segundo lugar, estoy de acuerdo en que salir de la cadena de mando está mal, pero también consideremos lo siguiente aquí: el hecho de que el USS Theodore Roosevelt tenía una gran cantidad de marineros infectados y esto no se puede mantener en secreto de todos modos, especialmente mientras en puerto. No solamente eso, sino ¿cómo sabemos que el Capitán Crozier no escribió otros memorandos a través de la cadena de mando regular antes de escribir el que se hizo público? Después de todo, cualquier memorando de este tipo podría clasificarse fácilmente y nunca hacerse público.
Finalmente, admitiré que mis simpatías están directamente relacionadas con el hombre que puso la vida de sus hombres y mujeres por encima de todo lo demás, y no con el zángano burocrático que puso procedimientos y volantes por encima de las vidas de los marineros y llamó “estúpido” al verdadero oficial por sus acciones (¡espera! ¡¿Un estúpido capitán de la USN ?! De alguna manera no lo creo …..).
Al momento de escribir (14 de abril) había 600 marineros del Theodore Roosevelt que contrajeron el virus y una muerte.
Finalmente, más de 4000 marineros han sido evacuados del barco (1000 todavía están a bordo para operar el reactor nuclear y otros sistemas clave).
En otras palabras, el USS Theodore Roosevelt ahora es completamente inoperable.
El artículo citado de CNN concluye con:
El vicepresidente del Estado Mayor Conjunto, general John Hyten, dijo a los periodistas el jueves que el ejército de los EE. UU. necesitaba planear brotes similares en el futuro mientras el Departamento de Defensa trabaja para hacer frente a los impactos del virus. “Creo que no es una buena idea pensar que el Teddy Roosevelt es un tema único. Tenemos demasiados barcos en el mar, tenemos demasiadas capacidades desplegadas. Hay 5.000 marineros en un portaaviones de propulsión nuclear. Pensar que nunca volverá a suceder no es una buena forma de planificar. Lo que tenemos que hacer es descubrir cómo planificar en este tipo de entornos Covid “, dijo Hyten.
Sin embargo, hay más pruebas de que la USN nunca tomó en serio una amenaza de bioataque.
Para ser honesto, parece que el ejército de los EE. UU. Tiene problemas similares, aquí hay un mapa de las bases afectadas de EE. UU. que encontré en el blog de Coronel Cassad
Parece que las fuerzas con base en los Estados Unidos nunca esperaron algún ataque real (aparte de uno de terroristas equipados con armas pequeñas), por lo que la seguridad de la NBC nunca fue una prioridad.
[Barra lateral: Tenga en cuenta que en Rusia, al menos hasta ahora (14 de abril), hay cero casos de militares infectados con el virus. Esto cambiará casi inevitablemente en el futuro, pero por el momento, es una realidad, a pesar de que las unidades militares rusas ayudan a combatir el virus tanto en Rusia como en el exterior. Solo digo…]
Sin embargo, esta no es una comparación justa. Primero, las bases ubicadas en tierra tienen muchas más interacciones con el mundo exterior que los barcos, incluso los barcos en puerto. Segundo, y mucho más importante, en caso de una pandemia o ataque químico / biológico, las bases ubicadas en tierra pueden aislar mejor a los afectados, traer más recursos o dispersar rápidamente al personal para protegerlos mejor. No se puede hacer esto en un barco. De hecho, cuanto más grande sea el barco, más parece un “crucero armado” que, como todos sabemos, es una gigantesca placa de Petri.
Preguntas como las anteriores aumentarán en número a medida que la pandemia arroje finalmente una luz muy necesaria sobre una impactante realidad acerca de que “¡el mejor! ¡mas poderoso! mejor equipado! ¡y la fuerza militar mejor entrenada en la Galaxia! ”: ni siquiera puede protegerse de un virus relativamente débil, ni hablar de derrotar a un enemigo competente.
¿Recibiremos respuestas? Eventualmente, probablemente sí. Pero por el momento, en EE. UU. se trata de cubrirse el trasero mientras se señala con el dedo y se culpa a los demás (¡especialmente a China, Rusia e incluso a la OMS!). Esta estrategia ha sido un fracaso absoluto en las últimas décadas y será un fracaso absoluto en el futuro.
[Barra lateral: la última decisión de Trump de desfinanciar a la OMS (a quien Estados Unidos ya debe una tonelada de dinero de todos modos) es posiblemente su peor acto de harakiri internacional de relaciones públicas” que aumentará aún más el asco que Estados Unidos ya inspira en todo el mundo. En cuanto a nuestros amigos israelíes, están orgullosos de que su Mossad de hecho robe equipos médicos a otros países: después de todo, los israelíes saben que la sangre judía es sagrada, mientras que la sangre de los goyim no tiene valor alguno. Otro caso de “harakiri internacional de relaciones públicas” autoinfligido de “la única democracia de Medio Oriente”]
Pero como esto es lo único que los políticos estadounidenses saben hacer, esta situación no se cambiará a corto plazo. Del mismo modo, lo que se conoce como la “fantasía de los portaviones” se mantendrá por el mayor tiempo posible, especialmente porque hay mucho dinero involucrado (que producirá muchas gananncias, ndt) para las clases dominantes de los Estados Unidos.
El saker
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