Serguéi Lavrov, para el programa Pozdniakov en el canal de televisión NTV, Moscú, 26 de septiembre de 2016

26 September 201619:02

Entrevista concedida por el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, para el programa Pozdniakov en el canal de televisión NTV, Moscú, 26 de septiembre de 2016

1739-26-09-2016

Pregunta: En la reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la ONU convocada por iniciativa de EEUU y varios países europeos la representante permanente de EEUU ante la ONU, Samantha Power, acusó a Rusia de cometer acciones “bárbaras”. ¿Otra vez pretenden colgarnos el San Benito?

Respuesta: Creo que es así en cierta medida. Además, la propia convocación de esta reunión, la iniciativa de los países occidentales de celebrarla urgentemente en domingo suscitó preguntas. Nos ocupamos de este tema durante toda la semana pasada, en el curso de los debates de alto nivel en la Asamblea General de la ONU. Al margen de estos debates suelen abordarse los temas más acuciantes para los países miembros de la ONU. Está claro que Siria estuvo en el centro de atención.

Se celebró una reunión ministerial del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Siria, dos reuniones del Grupo Internacional de Apoyo a Siria que organizamos junto con el Secretario de Estado de EEUU, John Kerry, como copresidentes y que duró muchas horas. Está claro que las delegaciones dedicaron mucha atención en sus discursos y las discusiones generales a la crisis siria.

Nuestros socios occidentales no repararon en expresiones. No nos acusaban literalmente de “barbaridad”, como Samantha Power con apoyo del representante permanente de Gran Bretaña ante la ONU, Matthew Rycroft, pero las acusaciones fueron muy duras: se acusó al Gobierno sirio y a nosotros de todos los pecados mortales.

Las respuestas a todas esas acusaciones ya las recibieron hace mucho. Por eso, sólo se puede hacer conjeturas sobre los motivos de convocar una reunión extraordinaria en un día festivo, aunque creo que es fácil adivinarlos. Occidente encabezado por EEUU que lidera la coalición que participa en las operaciones en Siria contra el Estado Islámico y, como dicen, contra el Frente al Nusra son incapaces de cumplir sus compromisos. Es evidente.

Pregunta: ¿Quiere decir usted que se puede interpretarlo como un intento de incumplir los acuerdos conseguidos?

Respuesta: Creo que no. Ahora simplemente tratan de distraer la atención de lo que pasó el 17 de septiembre en Deir Ezzor, cuando la aviación estadounidense bombardeó las posiciones del Ejército sirio, al declarar de inmediato que fue un error. Primero, las bombardeó durante una hora. Además, el representante oficial del Mando Central de Estados Unidos (Centcom), el coronel de la Fuerza Aérea, John Thomas, declaró recientemente, hace varios días, que “estudiaron a fondo este objetivo” durante dos días (hasta le cité en una rueda de prensa en Nueva York).

En Deir Ezzor la línea del frente se estableció hace dos años y la situación no cambia. Nosotros junto con la ONU lanzamos desde aviones los alimentos y otros artículos de la primera necesidad para los habitantes de esta ciudad asediados a los que defiende el Ejército sirio. Mientras, no sé si son bien adiestrados los que participan en las operaciones allí si en esta situación estática “estudian a fondo el objetivo” durante dos días, basándose en los datos de inteligencia, según John Thomas.

Pregunta: Nos acusan de cometer “barbaridades” y ¿qué dicen los hechos? ¿No se citan los hechos?

Respuesta: Se refieren a tales hechos como la muerte de los civiles. Muestran imágenes de edificios destruidos, de los civiles que corren, suelen decir que son vídeos grabados por los testigos. La segunda fuente que consideran irreprochable, que no suscita dudas es un piso de una habitación en Londres donde vive un ciudadano de Gran Bretaña de origen sirio y dirige a solas la organización que se llama “Observatorio Sirio para los Derechos Humanos”. Repito que está en Londres, pero le citan con la mayor frecuencia.

Quisiera centrar la atención en que los estadounidenses y sus socios occidentales quieren distraer la atención no sólo y no tanto de lo que pasó en Deir Ezzor. Estoy lejos de emitir veredictos definitivos, es una mala costumbre de nuestros socios occidentales. Se jactan de vivir en un Estado de derecho, de que sólo las autoridades judiciales pueden decidir si uno es culpable o no, que sus tribunales son independientes. Mientras, ocurrió lo mismo hace dos años, cuando en el cielo de Ucrania fue derribado un Boeing de Malaysia Airlines. Exigimos llevar a cabo una investigación, que el Consejo de Seguridad de la ONU estableciese el control sobre el proceso de investigación. Los estadounidenses dejaron aprobar la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, no la bloquearon, pero dijeron que sabían perfectamente quién lo había hecho. En este caso pasa lo mismo: el 19 de septiembre, atacaron un convoy humanitario, exigimos investigarlo y mi buen socio, John Kerry (aunque no es su modo típico de conducta) declaró que se podría llevar a cabo una investigación, pero sabían quién lo había hecho: el Ejército sirio o Rusia, pero en todo caso, Rusia es la responsable. A juzgar por todo, está bajo fuerte presión, porque se somete a duras críticas por parte de la maquinaria bélica de EEUU. Pese a lo que, según se declara siempre, el comandante en jefe de EEUU, Barack Obama, le apoyaba en su interacción con Rusia (lo confirmó él mismo en la reunión con el presidente ruso, Vladímir Putin), parece que los militares no obedecen a su comandante en jefe.

Pregunta: ¿No influye en esto la carrera presidencial estadounidense?

Respuesta: Creo que sí, lo que hace todo esto aún más inadmisible. Diré de esto, pero antes continuaré con el ejemplo de este convoy humanitario.

Nuestra reacción iniciar fue investigar de inmediato esta tragedia. Los estadounidenses reaccionaron de modo que lo sabían todo y no era necesario investigar algo. Muestran camiones derrotados y dicen que lo hizo la aviación rusa o siria. Los aviones sirios no vuelan de noche (y esto pasó en aquel momento), nuestros sí que vuelan. Pero si lo hizo la aviación, ¿dónde están embudos?

La conocida página web Bellingcat publicó datos de que allí se había descubierto supuestamente un impacto de una bomba de aviación de fabricación rusa. En otra página web del centro de análisis estadounidense Conflicts Forum apareció la información de otra índole: literalmente, durante los primeros segundos, en los cuadros transmitidos por el canal de televisión ABC fueron notables las huellas del polvo de aluminio típicos para las municiones con los que suelen dotarse aviones no tripulados Predator. Los estadounidenses no desmentían que en el momento cuando sucedió todo esto un aparato de este tipo estuvo sobre la zona de Alepo donde atacaron el convoy. Posteriormente, se recortaron estos cuadros donde estaban presentes las huellas del polvo de aluminio. El vídeo mostrado después por las cadenas de televisión, incluida la BBC, no contenía estos segundos. Pasa lo mismo, no quiero acusar a nadie, pero sabemos perfectamente cómo pueden las cadenas de televisión occidentales más grandes (CNN y BBC) manipular los hechos. ¿Se acuerda de que hace varios años mostraron lo que tuvo lugar en Irak haciendo pasar por lo que ocurre hoy en Siria. Por eso exigiremos que se lleve a cabo la investigación más exhaustiva. Lo afirmamos abiertamente.

Ahora diré un poco sobre la campaña presidencial. Es curioso.

Pregunta: Sí, pero se trazan allí líneas paralelas.

Respuesta: Sí que se trazan. A juzgar por todo, quieren demonizarnos y hacernos responsables de todo lo mal en el mundo. Hemos alcanzado éxitos reales en nuestras relaciones con los estadounidenses, por encargo directo de nuestros presidentes quienes, hace un año, durante su reunión en Nueva York, acordaron cooperar en Siria y lo confirmaron el pasado 6 de septiembre en Pekín. Durante todo ese tiempo, yo y John Kerry trabajamos con diligencia, celebrando reuniones personales y sosteniendo conversaciones telefónicas con mucha frecuencia sobre la creación de la coalición política, formamos el Grupo Internacional de Apoyo a Siria. Todos lo alabaron, porque por primera vez se logró reunir en torno a la misma mesa a todos los actores externos sin excepción quienes ejercen una influencia en la situación en Siria, incluidos tales antagonistas como Arabia Saudí e Irán.

Pregunta: Este acuerdo hasta se caracterizó como decisivo.

Respuesta: Sí, decisivo. A partir de aquel momento, nos encomendaron preparar mecanismos concretos de interacción en cuatro direcciones aprobadas a finales del año pasado por el Grupo Internacional de Apoyo a Siria y en el Consejo de Seguridad de la ONU: es el alto el fuego, el suministro de la ayuda humanitaria, la lucha contra el terrorismo y el inicio del proceso político. Es curioso hablar ahora porque este proceso político se frena ahora, es curioso hablar de las causas por las que la coalición antiterrorista estadounidense ataca sólo al Estado Islámico y no toca el Frente al Nusra, aunque el Secretario de Estado de EEUU, John Kerry, me asegura cada vez que del Frente al Nusra proviene la misma amenaza terrorista como del EI, pero no lo tocan.

Pregunta: Es paradójico. Parece que han reconocido esta organización como terrorista, pero siguen defendiéndola.

Respuesta: Es un círculo vicioso. Creen o no creen, no sé qué creen, en general, ahora hasta no sé a quién se puede creer y seguramente no puedo creer al 100% a ellos. Cada vez que nosotros y la aviación siria ataca las posiciones del Frente al Nusra que controla ahora la ciudad clave en el drama sirio – Alepo – ellos nos critican por atacar la oposición patriótica empujándola de este modo hacia el Frente al Nusra. Recordaré lo que ya he dicho en reiteradas ocasiones que el Secretario de Estado de EEUU, John Kerry, declaró en público que EEUU asume el papel clave para separar la oposición patriótica de los terroristas, incluido el Frente al Nusra. Recuerdo sus declaraciones hechas en las reuniones del Grupo Internacional de Apoyo a Siria y del Consejo de Seguridad de la ONU a finales del año pasado y a principios del año en curso que si no son terroristas y quieren participar en el arreglo político en Siria deben abandonar los territorios que ocupa el Frente al Nusra. No ha pasado nada a partir de aquel momento.

Es curioso. Ahora nos dicen que si la tregua es estable, prolongada y se establece en todo el país, si se levantan todos los obstáculos en el camino de acceso a la ayuda humanitaria, sólo en este momento se iniciará el proceso político. Bajo este pretexto los que formaron el llamado grupo de Riad y lo llamaron el Alto Comité de Negociación sabotean la reanudación de las negociaciones a partir del mayo pasado. Naturalmente, es una lástima que el enviado del Secretario General de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, se les deje llevar de la rienda y mire a nosotros y a los estadounidenses: en cuanto Moscú y Washington lleguen a un acuerdo hará todo a la vez y conseguiremos éxito. Es una postura irresponsable de huir de la responsabilidad.

Pregunta: Si entiendo bien, la tregua la aprovechan principalmente los terroristas.

Respuesta: Sin duda. Hubo pausas en las que no tardaron en enviar a Jabhat al-Nusra desde el extranjero nuevos refuerzos, más dinero y armas. Pero cuando hace casi un año, en noviembre y diciembre pasados, el Grupo Internacional de Apoyo a Siria (GIAS) acababa de iniciar el trabajo en su primer documento final, la declaración constituyente que contenía los principios básicos de su funcionamiento, se dio una situación muy tensa entre los partidarios de dejar expresamente plasmado que el conflicto en Siria no tiene solución militar (lo promovían Rusia, EEUU e Irán) y los que admitían, o tal vez consideraran prioritario, una solución militar del conflicto sirio. No señalemos con el dedo, pero fue un momento muy delicado.

Otra fórmula que abrió brecha entre los estadounidenses, los iraníes, los egipcios y los rusos, por un lado, y los que no querían descartar una intervención militar, por el otro, fue la relativa a la necesidad de declarar inmediatamente el alto el fuego total en todo el territorio de Siria. Tampoco se pudo dejar sentado aunque, repito, Rusia, EEUU, Irán, Irak, Egipto y muchos otros países estaban a favor de ello. Pero un pequeño grupo de los participantes del GIAS no pudieron apoyar este enfoque imposibilitando el consenso y derivando en una fórmula intermedia de que el alto el fuego se declarará de forma paralela al avance del proceso político. Ahora, los que insistieron en esta vinculación, empiezan a decir que primero tiene que haber una tregua estable y un acceso humanitario ilimitado y luego ya pensarán si iniciar el proceso político. La mala costumbre de cambiar las reglas del juego a mitad de partida resulta ser una actitud propia de algunos de nuestros socios. Lamentablemente, la contagiaron a EEUU que en estos últimos días, y me pesa observar y constatarlo, dejaron de desempeñar el papel de un copresidente imparcial del GIAS y obviamente pasaron a defender sus intereses única y exclusivamente cambiando cada vez las reglas de juego.

Pregunta: ¿Significa esto que se echaron a perder nuestros acuerdos con los estadounidenses sobre Siria?

Respuesta: No. Creo que ellos tampoco lo ven de esta manera. Por lo menos permanecemos fieles a los acuerdos conseguidos en los últimos meses y en los se puso el punto final después de que los presidentes ruso, Vladimir Putin, y el estadounidense, Barack Obama, habían despachado las últimas cuestiones cruciales durante su reunión el pasado 6 de septiembre en Pekín. Tres días más tarde, el 9 de septiembre, en Ginebra, John Kerry y yo terminamos de plasmar en papel estos acuerdos de ambos presidentes. Por desgracia, los siguientes pasos de EEUU ponen de manifiesto que pretenden condicionar la entrada en vigor de nuestros acuerdos en mayor grado de lo que está fijado en los documentos. Menos mal que éstos ya están publicados y en acceso público. De ahí que cualquiera puede comprobar los compromisos asumidos por cada una de las partes.

Pregunta: ¿Cree que alguien lo va a comprobar?

Respuesta: Quien esté interesado en saber la verdad lo comprobará. Quienes, en cambio, estén interesados sólo en avivar las pasiones que despierta la embajadora estadounidense ante las Naciones Unidas, Samantha Power, cuando habla de barbarie, son gente incorregible. Todos ya sabrán que lo más relevante en el formato y en la esencia del documento es la necesidad de separar la oposición moderada de los terroristas. El acuerdo lo fija como la prioridad clave. El resto ya deriva de la capacidad de cumplir el compromiso asumido por EEUU en calidad de copresidente de la coalición antiterrorista. Y lo habrían asumido en nombre de todos los miembros de la misma.

Pregunta: ¿Los últimos acontecimientos se traducirán en un mayor enfriamiento de nuestras, ya bastante frías, relaciones con Occidente?

Respuesta: Durante la reunión ministerial del Consejo de Seguridad de la ONU, que tuvo lugar la semana pasada, al mismo tiempo que el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y el servidor llevábamos a cabo dos reuniones del GIAS, nos llenaron de improperios, no se me ocurre otra palabra para describirlo. Al principio, los colegas intentaban guardar las apariencias ero algo les terminó sacando de quicio.

No descarto que de esta forma se pretenda desviar la atención de la necesidad de realizar una investigación exhaustiva de lo ocurrido con el convoy humanitario en Alepo y del ataque contra el ejército sirio en Deir ez-Zor. Esperamos la investigación de ambos casos. La primera es, sin duda, la obligación de la coalición. La investigación del ataque contra el convoy humanitario incumbe también a los que controlan la zona donde sucedió el ataque. Estoy convencido que a los expertos, no les costará nada, al analizar las municiones explotadas, determinar su naturaleza, si fue un ataque de artillería, desde un helicóptero o avión, un lanzacohetes múltiple o algo más. Se divulgó la información de que justamente en Alepo Oriental se encontraban instructores de algunos países de la región y podían encontrarse los instructores de los servicios secretos de EEUU y Gran Bretaña. Si es así, entonces, lógicamente, surge la pregunta de quiénes eran a los que entrenaban allí, porque el papel clave en la confrontación con el ejército sirio en Alepo, al igual que en muchos otros sitios,  pertenece a Jabhat al-Nusra.

Son demasiadas las cosas que tienen que ser aclaradas. Por cierto, otro detalle, cuando este “malogrado” convoy salía de Turquía a Alepo, por alguna razón, no iba acompañado por los empleados de la ONU, como lo estipula el protocolo. Es más, sonaron los avisos de mal agüero por parte de los opositores de Alepo Oriental sobre la posibilidad de que lo atacara el ejército sirio. Los mismos opositores que un mes antes (el 26 de agosto), antes de concluirse los acuerdos ruso-estadounidense, habían intentado acompañar un convoy humanitario a Alepo (los de la ONU y la parte siria estaban de acuerdo), ahora expresaba temores de que el convoy pudiera ser atacado y amenazaban con atacarlo ellos mismos porque pretendían que siguiera otra ruta. Entonces los representantes de la ONU se mostraron pusilánimes, quisieron convencer a los opositores, pero sin éxito. Aquí hay demasiadas preguntas a aclarar.

Es gracioso oír hablar a esta gente sobre la barbarie y las acusaciones de crímenes militares. Nuestros colegas británicos (y les aplaudimos por ello, a diferencia de los estadounidenses) formaron una comisión para investigar lo sucedido en Irak en 2003. La comisión lo calificó de una aventura que había carecido de fundamentos legales para una intervención militar y bombardeos de país. Pasaron 13 años y ahora presumen de ser unos nobles defensores de la verdad. Aún no ha llegado la hora de Libia. Creo que sí, habrá una investigación sobre Libia en los países que llevaron la batuta en esta otra aventura, sobre todo los británicos, los franceses, algunos países de la región. Los estadounidenses tampoco pueden presumir de grandes avances en la investigación de sus constantes errores. Ya he mencionado el error cometido en Siria, en Deir ez-Zor, ayer volvieron a equivocarse en Afganistán: en lugar de los talibanes bombardearon a sus aliados, el ejército afgano. Y todo esto, intentan callarlo.

Pregunta: Nos obligan a justificarnos, piden pruebas de que queremos un arreglo pacífico.

Respuesta: Estas reclamaciones se hacen especialmente ruidosas después de atacar, por error, una boda, un colegio, o un hospital en Afganistán o en Yemen. En seguida es de esperar que algo sirva de motivo para presentar unas reclamaciones histéricas a la Federación de Rusia. No creo que nuestros socios occidentales son tan primitivos pero, por lo visto, les produce picazón el hecho de no tener argumentos sobre la cuestión clave en la situación sitia, la de separar a los terroristas de la oposición y luchar contra éstos últimos sin piedad ni tolerancia.

Ellos declaran que el terrorismo en Siria es la amenaza principal, mucho más peligrosa que el régimen de Bashar Asad. Quizá no esté bien formulado pero es verdad que nadie niega que el terrorismo es el enemigo común número uno. Sin embargo, en la práctica hacen todo para “salvar” a Jabhat al-Nusra. Vemos que la coalición estadounidense asesta golpes contra el EI. Aunque empezó a hacerlo de verdad con la llegada a Siria, por petición del gobierno legítimo de este país miembro de la ONU, de la Fuerza Aeroespacial de Rusia. Pero nunca atacan las posiciones de Jabhat al-Nusra. Pregunté sin rodeos al secretario de Estado de EEUU, John Kerry, si esto significaba que alguien, no él personalmente, en EEUU o en la coalición que encabeza, deseaba proteger a Jabhat al-Nusra, impedir que se debilitara para luego, una vez derrotado el EI, reunir a todos los opositores y Jabhat al-Nusrá y empujarles hacia Damasco para que tomara el poder. John Kerry juró y perjuró que no era así. Sin embargo, en muchas ocasiones me dijo algo que luego fue desmentido por los militares y la inteligencia de EEUU.

Un ejemplo concreto. Todos saben que uno de los acuerdos cruciales entre Rusia y EEUU se refiere a la creación de un centro ejecutivo conjunto que, además de gestionar el intercambio de datos para evitar los incidentes aéreos, coordinará las acciones de los militares para conseguir una mayor eficiencia de los ataques contra los terroristas. Lo acordamos expresamente, al igual que fijamos la fecha del inicio de trabajos para crearlo, el 12 de septiembre. Durante los siete días en los que se esperaba la consolidación de la tregua, debíamos iniciar el intercambio de los datos de reconocimiento para, al finalizarse el periodo de siete días, reanudar los ataques contra los terroristas de acuerdo con los nuevos mapas definidos a partir de estos datos.

Pregunta: Ya pasó una semana.

Respuesta: Ya pasó más de una semana. Primero, la parte estadounidense alegó las infracciones de la tregua. Más tarde, en una sesión del Congreso de EEUU, el jefe del Estado Mayor Conjunto de EEUU, Joseph F. Dunford, declaró que “no era una buena idea” compartir los datos de inteligencia con los rusos. Esto significa que no lo harán. Y esto después de aprobarse los documentos que estipulan tal intercambio por una orden directa de los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y EEUU, Barack Obama. Los frenos que impiden la implementación de los acuerdos son muy duros. Creo que son excusas para no cooperar con nosotros motivándolo con la deficiente situación humanitaria. ¿Y por qué se ha complicado la situación humanitaria? Por culpa de Rusia y no van a investigar nada. Es difícil trabajar con tales socios peor no tenemos otros en Siria. Es una prueba más de que sólo conviene contar con las Fuerzas Armadas de tu propio país.

FUENTE:

http://www.mid.ru/en/foreign_policy/news/-/asset_publisher/cKNonkJE02Bw/content/id/2470301?p_p_id=101_INSTANCE_cKNonkJE02Bw&_101_INSTANCE_cKNonkJE02Bw_languageId=es_ES

Be First to Comment

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.